DOÑANA BIRDFAIR 2014 – LA CRÓNICA

La primera Feria Internacional de las Aves de Doñana se celebró entre el 1 y el 4 de mayo en la finca de la Dehesa de Abajo de la Puebla del Río, a tan sólo 25 kilómetros de Sevilla. La Doñana Birdfair ha nacido como conmemoración del 60 aniversario de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife) y homenaje a su fundador Mauricio Gonzalez-Gordon, estrechamente vinculado a Doñana.

La Doñana Birdfair también tiene intención de convertirse en un referente para los aficionados a la observación de aves cada primavera, al igual que la Rutland Birdfair lo es cada verano. De hecho, la feria británica ha colaborado activamente con el proyecto. Como es lógico no pudimos soportar la tentación y acudimos expectantes a la nueva feria.

Al llegar a la Doñana Birdfair lo primero que nos sorprendió fue la luminosidad del lugar elegido y la variedad del paisaje. La finca de la Dehesa de Abajo es un enclave espectacular para el aficionado a la observación de aves. En ella se distinguen cuatro paisajes diferentes: marisma, dehesa de encinas, pinar y laguna artificial. Al confluir tantos ecosistemas diferentes las especies de aves que podemos observar son muy variadas, desde el flamenco al abejaruco o desde el milano negro al elanio común. Todas ellas observables a pocos pasos de la Doñana Birdfair.

Dehesa de Abajo

Durante los cuatro días que duró la feria los aficionados a las aves pudimos deleitarnos con lo último en óptica gracias a expositores como Martín Iglesias y Óptica Roma. Del mundo editorial nos encontramos con Lynx, volcada en la promoción de “Alive” la versión digital del magnífico “Handbook of the Birds of the World”, y la revista Quercus inmersa en su “tercera fase” y en el empeño de sus nuevos gestores por alcanzar la viabilidad económica a través de las cuotas de sus suscriptores y no por medio de la publicidad como es norma casi obligada en el mundo de las publicaciones periódicas. También nos encontramos con iniciativas muy interesantes que pretenden sacar a la luz lugares que hasta ahora aparecían ocultos a los aficionados al birding como, por ejemplo, la Siberia extremeña o el interior de la región alicantina. Muy interesante nos pareció la iniciativa de la Fundación Victoria Laporta de comenzar a desarrollar actividades relacionadas con el turismo ornitológico en la Sierra de Mariola.

En cuanto a las charlas impartidas durante la feria, de las que pudimos asistir, nos pareció especialmente interesante la impartida por Tim Mackrill sobre el proyecto “Osprey migration and schools”. Tim nos mostró las actividades de educación ambiental que se realizan en las 104 escuelas de 9 países adheridas al proyecto y los vínculos que se establecen entre los alumnos y las águilas pescadoras en su viaje migratorio anual de 5.000 kilómetros desde el Reino Unido hasta el África Subsahariana.

También nos resultó muy interesante la charla de Antonio Atienza. Nos contó sus vivencias personales y su curriculum antes de ser fotógrafo de naturaleza. Su visión personal de cómo se puede contribuir a la conservación desde la fotografía nos pareció muy enriquecedora y realista.

Milano negro divisando a los asistentes a la Doñana Birdfair 2014

La finca de la Dehesa de Abajo fue la sede principal de la Doñana Birdfair, aunque también se realizaron actividades en el Centro Ornitológico Francisco Bernis de El Rocío y en la Cañada de los Pájaros.

El Centro Ornitológico Francisco Bernis fue sede de la exposición de pintura, del maratón ornitológico y de varias conferencias. De entre las 28 obras de la fase final del Certamen de Pintura resultaron galardonadas “Aprovechando los descartes”, de Antonio Sencianes Ortega, con el Premio del Jurado y “La mirada protectora”, de Francisco López Centella, con el Premio del Público.

“Aprovechando los descartes” de Antonio Sencianes Ortega. Premio del Jurado del Certamen de Pintura de la Doñana Birdfair 2014

«La mirada protectora” de Francisco López Centella. Premio del Público del Certamen de Pintura de la Doñana Birdfair 2014

En la Cañada de los Pájaros se realizaron talleres y actividades infantiles durante toda la Doñana Birdfair. Pudimos visitar el centro y resultó auténticamente espectacular, en muy poco espacio concentra un gran número de especies, muchas de ellas en peligro como la focha cornuda.

Cigüeñuelas en la Cañada de los Pájaros

Grullas sobrevolando la Cañada de los Pájaros en el mes de mayo

En cuanto a lo mejor y lo peor de la Doñana Birdfair 2014, tenemos que decir que nos gustó mucho el lugar elegido y el entusiasmo de los voluntarios. También el Tren-hotel de la Naturaleza que hizo la ruta Barcelona-Zaragoza-Madrid-Sevilla nos ha parecido una gran idea y que se nos pusieron los dientes largos cuando supimos que en su viaje de vuelta hizo una paradita en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. En cuanto a lo peor, sin duda, fue el hecho de que el Centro Ornitológico Francisco Bernis se encontrara a más de 60 kilómetros por carretera de la sede principal de la feria y que sus charlas se solapaban con las que se impartían en la Dehesa de Abajo, ello nos obligó a descartar conferencias y actividades a las que nos gustaría haber asistido.

Como resumen podemos decir que la recién nacida Doñana Birdfair ha cubierto nuestras expectativas. El lugar de celebración es excepcional, las charlas han sido de gran interés y la organización ha sido correcta. Mención especial merecen los voluntarios de la SEO/BirdLife española y también los llegados del Reino Unido. Parece que no hay empresa imposible para ellos, son capaces de preparar una gran feria ornitológica con muy poca experiencia previa y solventar cualquier imprevisto que se presente. Enhorabuena a todos los que habéis participado en la Doñana Birdfair 2014, aunque el número de visitantes haya sido inferior al previsto, aquellos que hemos asistido no dudaremos en repetir y en recomendar a todo el mundo la Doñana Birdfair 2015.

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