EN RECUERDO A BRANDY, EL ALIMOCHE DE JEREZ

En el Zoobotánico de Jerez nació el pasado 16 de mayo un polluelo de alimoche común (Neophron percnopterus). Se trata de uno de los pocos ejemplares de su especie que ha nacido en cautividad. De hecho, tan sólo sus padres han conseguido reproducirse en cautividad en España. El nuevo polluelo de alimoche todavía no tiene nombre y su sexo es desconocido. Cuando sea mayor probablemente viajará a otro zoo dentro del programa europeo de cría en cautividad, al igual que la mayoría de sus seis hermanos mayores nacidos entre 2003 y 2013.

Hoy queremos recordar a uno de estos hermanos. Su nombre es Brandy y nació en el Zoobotánico en junio de 2010. Poco después de venir al mundo fue elegido para cumplir una misión muy especial. Los alimoches, al igual que el resto de buitres europeos, han visto reducir sus poblaciones de forma dramática en todo el continente a lo largo del siglo XX. Hoy en día sólo España mantiene una población numerosa y es el último baluarte frente a su extinción. Sin embargo, también aquí la población de alimoche se reduce año a año en el sur y el este del país.

Brandy con 24 horas de vida

Brandy con 24 horas de vida

En la actualidad, las grandes amenazas a las que se enfrentan los alimoches son la escasez de alimento por el cierre de muladares, el choque con tendidos eléctricos y aerogeneradores y, muy especialmente, los venenos prohibidos y la autorización en España del uso veterinario del Diclofenaco.

A nuestro polluelo Brandy le esperaba un destino muy diferente al de la mayoría de las aves nacidas en cautividad. Con apenas dos meses de vida fue alistado en el Programa Capovaccaio y viajó al Centro Rapaci Minacciati de Rocchette di Fazio (Italia).

Brandy con su madre

Brandy con su madre

El alimoche es un ave migratoria que viaja hasta el África subsahariana cada invierno y regresa a Europa cada mes de marzo para reproducirse. Los polluelos de alimoche nacen en Europa y cuando aprenden a volar migran a África permaneciendo allí cinco años. Pasado este tiempo ya son adultos y regresan al lugar que les vio nacer para criar sus propios polluelos.

El Programa Capovaccaio aprovecha la filopatria que muestran los alimoches para intentar recuperar la especie en el sur de Italia. Los polluelos son liberados en el lugar donde se pretende asentar una nueva población de alimoche con la esperanza de que reconozcan ese enclave como su lugar de nacimiento y regresen a criar. Desde Rocchette di Fazio nuestro polluelo Brandy viajó hasta la región de Apulia donde fue introducido en una cueva pocos días antes de que estuviera listo para realizar sus primeros vuelos. El destino de Brandy era la libertad.

Brandy con sus hermanastros Sirio y Teo

Brandy con sus hermanastros Sirio y Teo

Acompañaban a Brandy dos polluelos de alimoche nacidos en el Centro Rapaci Minacciati, sus nombres eran Sirio y Teo. A mediados de agosto los tres realizaron su primer vuelo y a finales los hermanastros de Brandy dieron el salto a África. Nuestro Brandy se lo pensó un poco más y el 10 de septiembre comenzó su primera migración, ya era libre.

Gracias a unos emisores vía satélite pegados a su cuerpo se pudo seguir su ruta migratoria. El 15 de septiembre salió de Sicilia llegando esa misma noche a Libia volando en un sólo día más de 500 kilómetros. Después de recuperar fuerzas se internó en el desierto hasta el sur de Niger donde se asentó.

Brandy

Brandy

En marzo de 2015 Brandy debería volver al sur de Italia para criar por primera vez, sin embargo hay pocas esperanzas de que lo haga. Poco después de asentarse al sur de Niger, el 26 de diciembre, su transmisor vía satélite dejó de emitir. Probablemente Brandy ya no esté vivo.

La aventura de Brandy fue corta, como la de muchas aves que viven en libertad. Sin embargo, los proyectos de reintroducción como el Programa Capovaccaio son una de las últimas esperanzas para recuperar muchas especies en peligro de extinción. Ojalá algún día uno de los hermanos de Brandy participe también en un programa de reintroducción y consiga cerrar el ciclo reproductor criando a sus propios polluelos en libertad.

Si te ha gustado este artículo puedes compartirlo en tus redes sociales.

También te puede gustar...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *